Helpless Night [Cap.11]

Capitulo 11

Aquella situación en la que Ryosuke y Yuto se encontraban no parecía tener fin, al contrario, aquel beso se volvía cada vez más profundo.

-Yuto comenzaba a sentirse diferente, era la primera vez que experimentaba algo así, al mismo tiempo Ryosuke se sentía de la misma manera, el tener los labios de Yuto sobre los suyos era algo que de cierta forma comenzaba a convertirse en algo adictivo para el.

Poco a poco la temperatura subia, llego el punto en que los besos no fueron suficientes para Ryosuke, y de una forma instintiva deslizó su mano por debajo de la camisa de Yuto y suavemente comenzó a acariciar su pecho, provocando en Yuto cierto sentimiento de excitación por todo su cuerpo, y es que el roce de las manos de Ryosuke por su pecho desnudo eran delicados pero al mismo tiempo excitantes.

Después de unos minutos de áquel beso tan intenso, ambos terminaron con aquel beso, pero sin desperdiciar ni un segundo, con una iniciariva que hata el mismo desconocía, lentamente comenzó a besar el cuello de Ryosuke, este disfrutaba de aquellos besos y lentamente su cuerpo se excitaba.

Mientras deboraba lenta y deliciosamente el cuello de Ryosuke, lentamente le quito la playera a Ryosuke, dejando ver su desnudo torso, este sintiendose avergonzado, de una forma provocativa y con una mirada seductora se acerco a Yuto, al cuál lo besó apasionadamente en los labios al mismo tiempo que tambien lo despojaba de su playera.

Ambos, semidesnudos, seguian devorandose a besos, mientras lo hacían, Yuto abrazó a Ryosuke por la cintura, al mismo tiempo que lo recostaba lentamente en el piso, al quedar Yuto sobre Ryosuke, decidió volver a besar el cuello de Ryosuke, instantes despues se encontraba besando tiernamente su desnudo pecho mientras que lentamente acercaba su mano hacia su pantalon para desabrocharlo, y lentamente despojarlo de este junto con su ropa interior, al tener a Ryosuke completamente desnudo debajo de él, volvió a besarlo en los labios para rápidamente despojarse tambien de su pantalon y ropa interior.

Completamente desnudos, ambos comenzaron a llenarse de besos y caricias por todo el cuerpo, comenzaron a explorar lugares desconocidos para ambos, en cada beso y en cada caricia había un sentimiento tan profundo, que ambos jamás habían conocido hasta aquel momento.

Mientras Yuto acariciaba y besaba el pecho de Ryosuke, bajo su mano para acariciar con suevidad el miembro del pequeño, el cuál no dejaba de soltar lebes gemidos, el sentir la cálida mano de Yuto sobre su miembro y los suaves labios de este sobre su cuerpo era un sentimiento tan placentero que no podía evitar gemir placer.

En cuanto sintió que el momento en que se correría llegaba, tomo a Yuto con un poco de brusquedad y lo besó apasionadamente en los labios, miemtras que se corría en la mano del alto.

Después Yuto sabía lo que debía continuar, aunque jamás habia tenido relaciones con alguien, esto resultaba de cierta forma natural, ninguno de los dos tenian alguna clase de experiencia por lo que era doblemente placentero para ambos.
Así que al predecir el siguiente movimiento, Ryosuke abrió levemente sus piernas, al ver esto, Yuto, con sus dedos completamente humedos por el liquido de Ryosuke, comenzó a introducir uno de sus dedos por la entrada de Ryosuke, este al sentir el dedo de Yuto comenzó a sentir dolor, por lo que no pudo evitar en dejar salir un gran gemido de dolor, que poco a poco se convertía en un gemido de placer.

Al intuir que Ryosuke se encontraba listo para recibirlo, se preparo para entrar en el, pero antes de hacerlo, volvió a acercar su rostro al del pequeño, ambos se miraron fijamente a los ojos, y sin que Ryosuke se lo esperara, Yuto se acerco a su oido y le susurro.
-Mis sentimientos ahora son claros, Yamada-kun yo...-
Pero antes de que continuara, Ryosuke lo interrumpió.
-Lo sé... Yuto... tu cuerpo me lo esta diciendo en estos momentos así que...-
Yuto tampoco permitio que Ryosuke terminara de hablar, asi que mirandolo fijamente a los ojos y con el rostro completamente ruborizado le dijo firmememte.
-Te amo-
Aquellas palabras provocaron en Ryosuke una enorme felicidad, pero antes de que pudiera decir o reaccionar de alguna manera, Yuto comenzo a entrar en el lentamente.

Al sentir a Yuto dentro de él, hubo un poco de dolor, pero poco a poco su cuerpo se acostumbraba a aquella sensasión, y en lugar de aquel dolor el placer comenzaba a apoderarse de el.
Aún con aquellas dos pequeñas palabras dando vueltas por su cabeza, e incapaz de decir nada, sus ojos se llenaron de lagrimas, y mientras las embestidas de Yuto iban en aumento, las lagrimas de Ryosuke brotaban lentamente, eran lagrimas de felicidad.

En cada embestida, ambos experimentaban un placer inimaginable, y cuando el momento de Yuto llego, Ryosuke solo sintó como el liquido de Yuto se corría dentro de él.
Cansado, suavemente salió del interior de Ryosuke y se recosto a su lado, lo abrazó tiernamente, y antes de que pudieran quedarse dormidos Ryosuke hablo.
-Muchas gracias Yuto... Te amo-
Al escuchar esto, un enorme sentimiento de felicidad invadio todo su ser, en respuesta abrazo con toda la fuerza que le quedaba a Ryosuke, pegandolo fuertemente a su cuerpo, este di igual forma abrazaba a Yuto, insntantes después, ambos, abrazados y cansados, se quedaron dormidos, ninguno de los dos podían ocultar aquella sonrisa de sus labios mientras dormían, estaban satisfechos y completamente felices de estar abrazados a la persona que amaban, que aunque no tenian años,ni meses de conocerse, tan solo días, en ellos se había despertado aquel hermoso sentimeinto desde el primer instante en que sus miradas se cruzaron, y para ellos, eso era más que suficiente.

La tarde había pasado, el sol estaba a punto de ocultarse, lo que significaba que el día estaba a pocos instantes de terminar, y con él también se llevaría a Chinen de su lado.
Ambos habian disfrutado de una maravillosa tarde juntos, se habian divertido bastante, pero aunque lo habia prometido, Takaki no podía evitar el sentirse demasiado triste, este era el último día que pasaría con la persona que tanto amaba, era algo que definitivamente no podía soportar por mucho que entendiera las razones de Chinen.

Por otro lado, Chinen tampoco podía evitar el sentirse vacio, sabia que al irse no solo dejaba a Takaki, tambien a la persona que más amaba en este mundo.
-Takaki...-
Dijo Chinen deteniendose a la mitad del camino, Takaki se detuvo y se giro para ver a Chinen.
-Takaki yo... yo me voy para cumplir mi sueño y estudiar lo que mas amo, prometo que en cuanto vuelva sere un fotografo profesional y entonces... pero solo hasta ese entonces, estaremos juntos para siempre... pero mientras no estoy, quiero que me prometas algo...-
Takaki no dijo nada y siguio escuchando a Chinen con atención.
-Por favor, busca a Yamada, sé que aun te duele recordar aquellos días, y se que te duele más a ti que a mi, así que por favor, buscalo y arregla las cosas, estoy completamente seguro de que él te escuchara-

Ante esta petición, Takaki guardo silencio, bajo la mirada, estaba confundido, no estaba seguro de poder siquiera atreverse a acercaese a Ryosuke.
Al ver su rostro preocupado, Chinen se acerco a Takaki, y con sus manos, tiernamente tomo el rostro de Takaki y mirandolo fijamente a los ojos le dijo.
-Yo se lo dificil que debe ser para ti buscar a Yamada despues de lo que sucedió, pero el te escuchara y comprendera lo que hiciste, el esta cambiando, alguien lo esta cambiando y se que el te escuchara-

Las imagenes del pasado pasaron velozmente por la cabeza de Takaki, pero lo que más presente se mantenía era la imagen de Ryosuke observandolo con lagrimas en los ojos, al mismo tiempo que lo miraba con odio y le gritaba, esa imagen jamás desaparecería de su cabeza.
-Esta bien... lo hare... hablare con el-
-Gracias Takaki, ya veras que despues de hablar con el todo cambiara-
-Si tu lo dices...-
En ese momento la enorme sonrisa en el rostro de Chinen hicieron que Takaki también sonriera, pero aquella dulce atomosfera fue interrumpida por una melodia proveniente del movil de Chinen.

Mientras Chinen atendia aquella llamada, Takaki se giro, no queria que el pequeño notara su triste rostro, sabía que el momento de separarse cada vez esaba más cerca.
Al terminar aquella llamada, Chinen se acero a Takaki, y haciendolo girar para quedar frente a frente le dijo.
-Mi vuelo... saldra mañana a las 12 de día, te estare esperando en el aereopuerto, ¿vendras cierto?-
Con una sonrisa amraga, Takaki respondió.
-Ahi estare Yuri-
Después, ambos se besaron dulcemente, al terminar aquel beso, con la mirada triste, Chinen observó a Takaki.
-Debo irme ahora, mis padres me esperan en casa, nos veremos mañana ¿de acuedo?-
-De acuerdo-
Dijo Takaki.
-Hasta mañana-
Dijo Chinen con una tierna sonrisa, se dio media vuelta, y emprendio su camino de regreso a casa, Takaki solo se quedo ahi, de pie, obsevando como Chinen se perdia entre la gente, cuando lo perdio por completo de vista, y con un vacio en el pecho, emprendio el camino de regreso a casa.

Cuándo Ryosuke despertó, pudo darse cuenta que Yuto aún seguía a su lado, hecho ante el cual no pudo evitar el dejar salir una enorme sonrisa, se reincorporo lentamente para no despertar a Yuto, al ver su reloj se percato de que ya era bastante tarde y comenzaba a hacer frio, se puso su ropa interior y se dirigió a la habitacion de Yuto, de donde quito la cobija que cubria la cama de este y la llevo hacia donde estaba Yuto completamente dormido.

Aunque aún era temprano, no deseaba volver a casa, queria quedarse con Yuto, así que sacó su movil del bolsillo de su pantalon, pero al abrirlo se encontro con un mensaje de Chinen, al leerlo se quedo sorprendido, este mensaje decia:
"Yama-chan, partire de regreso mañana, me alegraria mucho verte en el aereopuerto para despedirnos, mi vuelo sale a las 12 del dia, te estare esperando"

-"Ya tan pronto se va... me hubiese gustado hablar más con el..."-
Pensó mientras salia del mensaje y comenzaba a llamar a casa, avisaba que no llegaria a casa y que no iria a la escuela, ante las insistentes preguntas de su madre, Ryosuke decidió terminar con la llamda.
Después, al dejar su movil sobre la mesita, se recostó de nuevo al lado de Yuto, y minutos después, volvió a qudarse dormido.