Capitulo 6
Al sentir como Ryosuke respondía a aquel beso, un sentimiento de tranquilidad y felicidad invadió a Yuto, debilitando así el agarre que tenía sobre el chico.
Ryosuke al sentir como Yuto lo agarraba con menos fuerzas, aprovechó la oportunidad, y con la mano que tenía sobre el pecho de Yuto, empujó al chico con todas sus fuerzas, haciéndolo retroceder hasta casi caer al suelo.
Yuto estaba sorprendido, jamás se imaginó que Ryosuke pudiera aventarlo con tanta fuerza.
-Yama-chan…-
-¡No me digas así! ¿Qué? ¿Estas sorprendido? ¿Esperabas que tan solo con un beso te perdonara y que todo volviera a la normalidad? Pues bien, déjame decirte que estas muy equivocado, así que mejor lárgate de aquí, entiende que no quiero estar cerca de ti-
Y mirando fríamente a Yuto, Ryosuke se dio media vuelta y entro a su casa, cerrando con fuerza la puerta.
Al quedarse solo afuera, no pudo contenerse más y unas cuantas lagrimas comenzaron a escapar de sus ojos, suspiró profundo, limpió su rostro y gritó.
-¡¡¡Solo quiero que nunca olvides cuanto te amo!!! ¡¡¡Jamás existirá alguien que te ame tanto como yo Ryosuke!!!-
Esperaba que al menos el chico saliera de su casa, pero esto no ocurrió, y sin nada más que hacer, se dio media vuelta y comenzó a alejarse a paso lento, el cuerpo le pesaba, no tenía ánimos de mover un solo músculo más, sin embargo su cuerpo se movía por si solo.
Mientras tanto, Ryosuke escuchó a la perfección aquellas palabras, se encontraba recargado en la puerta, algo dentro de el luchaba por no salir detrás de Yuto, y sin más alternativa, se dejó caer lentamente al suelo, al estar ahí, unas lagrimas furiosas comenzaron a salir con fuerza de sus tristes ojos. Odiaba esto, realmente odiaba esto, por un momento pensó en olvidarlo todo, en regresar con Yuto, con la persona que lo había hecho feliz durante tanto tiempo, pero eso era imposible, después de todo aún no lo podía perdonar.
A la mañana siguiente, Chinen despertó con dificultad, los fuertes rayos del sol que se infiltraban por toda la sala ya no le permitían seguir soñando, así que con pereza abrió los ojos, miró a su alrededor y se alegró de ver que aún seguían estando solos, después de todo su madre no llegaría hasta más tarde, así que sin más trató de levantarse pero miró a su lado y ahí estaba Yuma, quien igual comenzaba a despertar.
-Buenos días-
Lo saludó Chinen con una sonrisa, lentamente Yuma se reincorporó y de igual forma le sonrió.
-Buenos días-
-¿No tienes frío?-
Preguntó Chinen pícaramente.
-Ah… no mucho…-
Y es que se habían quedado dormidos completamente desnudos sobre el sillón.
-A mi me duele un poco el cuello-
Dijo Chinen mientras movía en círculos la cabeza.
-Igual a mi-
Le dijo Yuma.
-Para la próxima trataré de llevarte directo a mi habitación-
Agregó Chinen mientras miraba de forma coqueta a Yuma, provocando que el chico se ruborizara ligeramente.
Después ambos se levantaron y se vistieron, Chinen se dirigió a la cocina.
-No tengo nada para desayunar, ¿Te parece si compramos algo por ahí?-
Yuma bajó la mirada y dijo en un tono triste.
-Yo tengo que irme ahora, dentro de poco comenzaran las grabaciones nuevamente y no puedo llegar tarde, así que no te preocupes por mi-
Esto entristeció lentamente a Chinen, esto se vio reflejado en su triste mirada, la cual se esforzaba por ocultar, pero era imposible.
-Ya veo…-
-Si… pero, prometo llamarte más seguido, solo será un mes más, después de eso podremos pasar más tiempo juntos, lo prometo-
Esto era alentador para Chinen, sabía muy bien que esto le dolía de igual forma a Yuma, así que debía despedirse con una sonrisa, después de todo ahora había algo mucho más profundo que los unía. Así que se acercó lentamente a Yuma y lo abrazó con ternura, tocando suavemente su espalda con sus manos, al sentir a Chinen así, Yuma lo abrazó de vuelta y rodeo la cintura del pequeño con sus brazos.
Ambos permanecieron así unos minutos, después de todo no sabían hasta cuando serían capaces de abrazarse así de nuevo. Permanecieron juntos, disfrutando del calor del otro, después inevitablemente se separaron.
-Debo irme-
Dijo Yuma sin muchos ánimos, Chinen notó esto y sabía que no estaba bien que el chico se fuera con esa actitud, así que trató de animarlo un poco.
-Te deseo mucha suerte, sé que conseguirás ser el mejor, pronto todo terminará-
Yuma sonrió ante el comentario de Chinen y le dio un pequeño beso en la frente.
-Tienes razón, trabajaré duro, por favor tienes que cuidarte mucho y…-
Ahí estaba de nuevo, la preocupación amenazante en el rostro de Yuma, Chinen no entendía por que era así.
-Ya te lo dije, ¿Lo olvidaste? Soy tuyo y de nadie más-
Al ver el tranquilo rostro de Chinen, Yuma comenzó a sentirse realmente tonto por dudar y preocuparse de esa manera, así que sonrió y dijo.
-Es verdad-
-Eso esta mucho mejor-
Le dijo Chinen, era mucho mejor ver el sonriente y tranquilo rostro de Yuma que ese rostro preocupado el cual no lograba comprender.
-Entonces… supongo que debo irme…-
-Bien, trabaja duro, aunque no puedas responder yo siempre te enviare un mensaje cada noche, lo prometo-
-Prometo tratar de responderlos-
Ambos se sonrieron, aún Yuma seguía abrazando a Chinen y este igual a Yuma, así que aprovechando la situación, un beso de despedida era el más adecuado. Y lentamente, ambos se acercaron hasta juntar sus labios en un suave y delicado beso que se hizo poco a poco más profundo. Ambos jugando entre sí, juntando y separando sus labios en lapsos cortos hasta que se separaron. Entonces Yuma soltó a Chinen lentamente, el menor hizo lo mismo.
-Ahora si debo irme-
-Ve con cuidado-
Así, ambos caminaron rumbo a la puerta, y antes de irse Yuma besó velozmente a Chinen en los labios, este tardo en reaccionar, al separarse Yuma le dijo con una linda sonrisa.
-Te amo-
De inmediato Chinen se ruborizó por completo, pero después sonrió muy feliz y respondió.
-Yo igual, Te amo-
Rápidamente se abrazaron de nuevo y se besaron suavemente, deseando que aquella separación no fuera necesaria, sin embargo la realidad era completamente diferente, y separándose de nuevo Yuma dio un paso hacia atrás.
-Nos veremos de nuevo, cuídate mucho-
Chinen simplemente asintió con la cabeza y sonrió. Entonces Yuma se dio media vuelta y comenzó a alejarse lentamente. Chinen solo observó como se alejaba más y más hasta perderse de vista, después entro a la casa y cerró la puerta, debía ahora alistarse para ir a clase o llegaría tarde.
Al llegar a la escuela se encontró con Chinen, quien también iba llegando, este al verlo lo saludó alegremente.
-Yama-chan, buenos días-
-Buenos días-
Saludó con una sonrisa fingida.
-Parece que ya te vez de mejor humor, ¿Paso algo?-
Ryosuke trató de fingir que no comprendía a que se refería Chinen.
-No pasa nada, no sé a que te refieres-
Y así, se marchó dejando a Chinen atrás. Pero por si eso no era suficiente, al entrar al salón se encontró con Yuto, el cual al parecer no había notado su presencia, puesto que tenía la mirada perdida hacia la ventana. Afortunadamente, según el, no todo era malo, sus lugares estaban bastante alejados, por lo que sin más, tomo asiento y mirando hacia el frente trato de no recordar lo ocurrido la tarde anterior. Y pudo haber continuado con esa idea de no ser por que la voz de alguien llamando a Yuto lo hizo voltear, llenándose de nuevo de aquella rabia que deseaba poder contener.
-¡Yuto!-
El aludido regresó a la realidad y miró hacia la puerta, ahí estaba su buen amigo Keito.
-Keito… ¿Qué haces aquí tan temprano?-
-Ven-
Le dijo su amigo, entonces Yuto se puso de pie y caminó hacia la puerta en donde Keito lo esperaba.
-¿Qué ocurre?-
Preguntó Yuto.
-Eso es lo que yo te pregunto, anoche que te llamé me dejaste muy preocupado, ¿En donde rayos andabas a esas horas de la noche?-
Le dijo Keito con un tono de voz muy preocupado, Ryosuke escuchaba de aquella platica con mucha tensión sin comprender nada.
-Solo… salí a dar una vuelta, eso es todo-
-¿A media noche? ¿A quién quieres engañar?-
Preguntó Keito un poco molesto. Por otro lado Ryosuke seguía escuchando atentamente y no pudo evitar el sentirse preocupado.
“-¿Caminando solo a media noche? ¿Pero que le pasa a ese tono?-”
Pensó mientras continuaba escuchando.
-No es nada importante, de verdad no tienes de que preocuparte…-
Yuto bajo la mirada y después la desvió para mirar a Ryosuke, quien estaba de espaldas, este pudo sentir la mirada de Yuto y un escalofrío recorrió su cuerpo. Keito se dio cuenta de esto y le dijo.
-De acuerdo, hablaremos más tarde-
Y sin más, Keito se marcho, Yuto se quedó unos instantes sin moverse, después reaccionó y volvió a su lugar, perdiéndose de nuevo en sus pensamientos, mirando el despejado cielo de la mañana.
Ryosuke no podía controlarse, estaba realmente preocupado, el hecho de solo imaginarse a Yuto caminando solo, a media noche por las calles lo preocupaba demasiado, ¿Acaso era por lo ocurrido aquella tarde? No deseaba admitirlo pero no se le ocurría otra cosa, lentamente se giro y miró a Yuto, este de nuevo estaba con la mirada perdida en la ventana, realmente se veía muy mal, de pronto, Ryosuke sintió un punzante dolor en el pecho.
“-No voy a preocuparme, no voy a preocuparme-”
Pensó mientras volvía a mirar hacia el frente, pero el solo hecho de pensarlo significaba que ya estaba preocupado. De pronto la profesora de Literatura entró al salón y las clases dieron inicio.
Yuma había llegado a tiempo a la grabación, en cuanto llego comenzaron a vestirlo, maquillarlo y peinarlo, después las grabaciones comenzaron nuevamente.
Mientras decía sus diálogos correctamente no dejaba de sentirse entusiasmado, el haber estado con Chinen un día entero lo había llenado por completo de energía, estaba listo para superar este último mes de trabajo, sin dejar de pensar en la palabras de su pequeño novio.
Un corto descanso para comer había llegado y Yuma estaba acompañado por Kento.
-¿Así que… la pasaste bien ayer?-
Preguntó el chico con cierto tono travieso.
-Si, muy relajante, ¿Y tu?-
-Bueno, lo normal, salí con unos amigos y conocí a una chica muy linda-
-¿A si? Eso es bueno-
Dijo Yuma emocionado mientras le daba unas palmaditas en la espalda a Kento, el cual se ruborizó por completo.
-Lo sé… quedamos de vernos en la próxima ocasión-
-Vaya, eres rápido-
Kento se ruborizó aún más con este comentario.
-¿Y como van las cosas con Chinen-kun?-
-Bien, todo bien-
-Eso me alegra, a decir verdad comenzaba a preocuparme, había escuchado que últimamente estaba muy cerca de Yamada-kun y pensé que…-
Kento no sabía como decirlo, sin embargo Yuma sabía lo que este quería decir.
-No te preocupes, lo que hay entre Chinen y yo es mucho más fuerte, no terminará tan fácil-
Yuma estaba muy sonriente, después de todo confiaba en esas palabras, Kento se alivio al ver a su amigo tan lleno de energía.
-Si es así entonces olvida lo que dije-
Entonces ambos sonrieron y continuaron comiendo.
Al llegar el descanso, Ryosuke guardaba sus libros en el compartimiento de su pupitre, se puso de pie y discretamente miró a Yuto, este cerraba lentamente su libro de texto, se veía realmente mal, al verlo así no pudo contenerse más, quería acercarse y preguntar que era lo que le pasaba. Estaba a punto de dar el primer paso cuando Keito entró al salón y se dirigió hacia donde Yuto se encontraba, se quedó inmóvil, solo observando como este se llevaba a Yuto y lo sacaba del salón.
“-No sé para que me preocupo si todo el tiempo Keito estuvo a su lado-”
Y con un suspiró, espero unos minutos y después salió del salón, tal vez debería buscar a Chinen, aunque no tenía muchos ánimos de hacerlo, no quería escucharlo hablar de Yuma todo el tiempo, esta vez lo mejor era estar solo, y eso hizo, primero paso a comprarse algo que comer, después caminó hacia uno de los jardines y tomo asiento sobre el suave pasto.
Mientras comía lentamente su pan relleno de fresa, un recuerdo vino a su cabeza.
- - - - - -
-Yama-chan, buenos días-
Al escuchar la voz de Yuto detrás de el se giró para verlo, le regalo una sonrisa y espero al chico.
-Buenos días-
Al haber alcanzado a Ryosuke, Yuto le dio un beso suave a Ryosuke en la mejilla, provocando que este se ruborizara ligeramente.
-Tengo algo que te encantará, es algo nuevo que encontré en la cafetería-
-¿De verdad? Pero si aún no abren la cafetería-
Comentó Ryosuke confundido.
-Lo sé, pero pase por ahí de pura casualidad, aún no puedo conseguirlo pero será más tarde, tu solo espera-
Ryosuke miró confundido al sonriente rostro de Yuto, después ambos entraron al salón de clases y continuaron hablando de otras cosas.
Al llegar el almuerzo, Yuto salió corriendo, Ryosuke lo miró extrañado y pensó que tal vez iba al baño o algo parecido, así que se adelanto y se dirigió a una de las bancas del patio de la escuela en donde solían desayunar juntos.
Rato después llegó Yuto con la respiración muy agitada.
-¿Qué ocurre?-
Preguntó Ryosuke preocupado al ver a Yuto tan agitado, este tomo aire y tomó asiento junto a Ryosuke.
-Cierra los ojos-
-¿Eh?-
-Vamos, ciérralos-
Confundido, Ryosuke obedeció y cerro lentamente los ojos, después pudo sentir como Yuto tomaba su mano y ponía algo en ella. Al abrir los ojos se encontró con un pan en la mano.
-¿Qué es eso?-
Preguntó extrañado.
-Bueno, si te fijas bien verás que es un pan-
-Eso ya lo sé-
Exclamo Ryosuke mientras le daba un golpecito en la cabeza a Yuto.
-Solo cómelo-
Le dijo Yuto con una sonrisa torpe, Ryosuke extrañado abrió la bolsita que envolvía al pan y le dio una mordida. De inmediato su rostro se lleno de felicidad, el pan estaba relleno de fresa.
-Es nuevo, como tu nunca compras en la cafetería imaginé que te enterarías demasiado tarde, así que ahora eres el primero en probarlo-
Emocionado, Ryosuke abrazó con fuerza a Yuto y le dijo al oído.
-Gracias Yuto, esta delicioso, te quiero-
Yuto lo abrazó de vuelta y le respondió.
-Yo igual te quiero-
Después se separaron y se sonrieron.
- - - - - -
Al recordar aquello no pudo evitar notar el dolor que sentía en su pecho, termino de comerse aquel pan y pudo sentir como sus ojos se llenaban poco a poco de lagrimas.
“-¿Por qué tenías que engañarme de esa manera?-”
Y sin más, encogió sus piernas y pego las rodillas a su pecho, hundiendo su rostro en ellas.
Chinen caminaba buscando a alguien con quien almorzar, sorpresivamente se encontró con Ryosuke quien no se veía nada bien, así que sin más se acercó de prisa al chico.
Al acercarse, se arrodilló y tocó delicadamente su cabeza.
-Yama-chan… ¿Qué ocurre?-
Al escuchar la voz de Chinen levantó lentamente la cabeza. En cuanto vio los ojos llorosos de Ryosuke Chinen se preocupó.
-¿Qué ocurre? ¿Te sientes mal?-
Ryosuke no respondió y sin más, abrazó con fuerza a Chinen, pegándolo a su cuerpo suavemente y así las lagrimas comenzaron a salir.
Chinen no sabía como reaccionar, sin embargo sabía que algo no andaba bien con su amigo así que lo abrazo de vuelta.
Ambos no notaron que eran observados, y es que Yuto pasaba por ahí junto a Keito y sin atreverse a seguir viendo, se dio media vuelta y se fue corriendo, tras el fue Keito, sabía que su amigo necesitaría apoyo en esto.
Pero también alguien más lo observaba, desde otro lado, mal interpretando las cosas y preocupándose.
-Pobre Yuma… esto tiene que saberlo, Chinen lo engaña con Yamada-kun…-
Así, aquel chico tomó su teléfono e hizo una llamada.
Mientras Yuma grababa una escena importante, Kento estaba jugando con los otros chicos actores, hasta que de pronto su teléfono comenzó a sonar. El chico sorprendido miró quien llamaba.
-¿Yugo-kun? ¿Qué será?-
Murmuró, y antes de que la llamada se cortara respondió. Escuchó atentamente lo que su amigo le contaba, no podía creerlo, no se atrevía ni siquiera a imaginarlo, pero entonces Yugo le mando por medio de mensaje una foto que lo probaba.
-No puede ser…-
Dijo en voz baja, después se giró para ver a Yuma, quien seguía grabando como si nada.
1 comentario:
:o dios que chismoso es yugo xDDD
no es lo que ustedes piensan (Yuma, Yuto)
Gracias por este great fic
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